Columna de Gianfranco Castagnola en Peru 21
El proyecto de ley de crédito suplementario que obliga a todas las entidades públicas -gobierno central, gobiernos regionales y municipalidades- a depositar sus fondos exclusivamente en el Banco de la Nación pone de manifiesto las complejidades de la descentralización. La medida pretendería ordenar la administración financiera de los fondos públicos, después del caso de la región Áncash, que ilustró la inexperiencia de una autoridad regional, de un lado, y la falta de directivas claras del Gobierno Nacional, de otro. Otra vez, un problema de gestión pretende ser resuelto con una medida drástica, dictada desde arriba y aplicable para todos. En lugar de pretender retornar a un monopolio centralista e inviable, se debería formular un buen reglamento, capacitar a los funcionarios y establecer un sistema de información y supervisión. Estos son, precisamente, los temas que deben definirse y afinarse en el proceso de descentralización.
sábado, 26 de mayo de 2007
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1 comentario:
Otro monopolio, mejor dicho. ¿Acaso los pensionistas públicos, para citar sólo un ejemplo, deciden donde cobrar?
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