Columna de Gianfranco Castagnola en Peru 21
El Perú tiene un enorme déficit de infraestructura, y el sector privado debe jugar un rol muy importante en su cobertura. El principal rol de Proinversión es este: canalizar recursos del sector privado para que a través de concesiones invierta en carreteras, aeropuertos, puertos, saneamiento, etc. Estos procesos son mucho más complejos que los de una privatización: los contratos regulan una relación de 25 o 30 años, a veces se necesita subsidios cuya operatividad puede generar incentivos incorrectos, etc. Por eso mismo, su avance suele ser más lento que lo deseable, más aun si se necesita concertar con gobiernos locales y regionales y si el propio Gobierno le pone trabas alejando cuadros técnicos del sector público con los topes salariales. Quitar la confianza a técnicos intachables con vocación de servicio público y con experiencia ha sido un error. Quienes sean nombrados en Proinversión enfrentarán los mismos problemas que sus antecesores.
sábado, 30 de junio de 2007
jueves, 28 de junio de 2007
Reina de Corazones
Columna de Eduardo Morón en El Comercio
Esta semana lo que más me llamó la atención han sido las enérgicas críticas del Presidente que han terminado en la renuncia del Director Ejecutivo de ProInversión. La excusa de turno fue que la población de Puno se quejaba amargamente que una vez más se postergaba la carretera interoceánica sur.
Por un lado, me alegró mucho que algún pueblo por fin proteste porque no lo dejan progresar a través de contar con un mayor acceso a los mercados y a la posibilidad de mejorar su competitividad gracias a una mejora sustantiva en su infraestructura. Por otro lado, la reacción presidencial de quitarle la confianza a un funcionario que depende de 8 ministros y al presidente de OSITRAN a quien nunca se la dio me hizo recordar uno de mis cuentos infantiles favoritos. En Alicia en el país de las maravillas, la reina de corazones no tenía mejor forma de resolver cualquier conflicto que sentenciando a viva voz “¡que le corten la cabeza!”. Y quien se atreviese a disputar su criterio y determinación también sería penalizado con el mismo castigo al instante. La reina de corazones no entendía razones ni acepta explicaciones, es más, ni las buscaba.
No se si recordarán pero uno de los pasatiempos favoritos de la reina era jugar al croquet, juego que consiste en pasar unas pelotas de madera por en medio de unos pequeños arcos de metal clavados en el suelo golpeándolos con unos palos de madera. El problema es que en la novela de Lewis Carroll, la reina se exaspera pues en su juego las pelotas son unos escurridizos erizos que no se dejan golpear. En lugar de palos, la reina juega con flamencos que no están precisamente muy encantados con la idea de golpear una pelota con su cabeza. Ante tanto problema en el juego la reina resuelve que sean sus soldados, los naipes, los que hagan de arcos. De ese modo, no importa que los erizos o los flamencos no cooperen. Para eso están sus incondicionales soldados quienes deberán moverse o sufrir el castigo sumario: “que le corten la cabeza”. Así cualquiera coopera, ¿no?
Sin embargo, lo más lógico sería preocuparse por entender por qué es que no se puede jugar apropiadamente al croquet y no cortar cabezas hasta quedarse sin jugadores. ¿Por qué es mejor cambiar los instrumentos del juego en lugar de amenazar con cortarle la cabeza a quien se ponga en la oposición indolente?
¿Por qué ninguno de los ministros que participa de ProInversión salió en defensa de René Cornejo? ¿Temía que su cabeza fuera la que rodase en lugar de la del Director Ejecutivo de ProInversión? La rápida renuncia de Cornejo le ha facilitado la vida al Presidente de OSITRAN quien ahora puede permanecer en silencio mientras al Presidente García alguien le explica que en realidad otras eran las cabezas que debía haber reclamado.
No quiero cerrar esta columna reconociendo públicamente mi aprecio por la destacada labor de la Ministra Araoz quien junto al equipo del Mincetur han logrado sacar adelante el Tratado de Libre Comercio con EEUU. Para ella y su equipo vayan los aplausos del caso. Me encantaría que hoy jueves la tapa de este diario informase sobre la aprobación del protocolo de enmiendas por parte de nuestro Congreso. A seguir abriendo puertas de oportunidad y prosperidad para todos los peruanos.
Esta semana lo que más me llamó la atención han sido las enérgicas críticas del Presidente que han terminado en la renuncia del Director Ejecutivo de ProInversión. La excusa de turno fue que la población de Puno se quejaba amargamente que una vez más se postergaba la carretera interoceánica sur.
Por un lado, me alegró mucho que algún pueblo por fin proteste porque no lo dejan progresar a través de contar con un mayor acceso a los mercados y a la posibilidad de mejorar su competitividad gracias a una mejora sustantiva en su infraestructura. Por otro lado, la reacción presidencial de quitarle la confianza a un funcionario que depende de 8 ministros y al presidente de OSITRAN a quien nunca se la dio me hizo recordar uno de mis cuentos infantiles favoritos. En Alicia en el país de las maravillas, la reina de corazones no tenía mejor forma de resolver cualquier conflicto que sentenciando a viva voz “¡que le corten la cabeza!”. Y quien se atreviese a disputar su criterio y determinación también sería penalizado con el mismo castigo al instante. La reina de corazones no entendía razones ni acepta explicaciones, es más, ni las buscaba.
No se si recordarán pero uno de los pasatiempos favoritos de la reina era jugar al croquet, juego que consiste en pasar unas pelotas de madera por en medio de unos pequeños arcos de metal clavados en el suelo golpeándolos con unos palos de madera. El problema es que en la novela de Lewis Carroll, la reina se exaspera pues en su juego las pelotas son unos escurridizos erizos que no se dejan golpear. En lugar de palos, la reina juega con flamencos que no están precisamente muy encantados con la idea de golpear una pelota con su cabeza. Ante tanto problema en el juego la reina resuelve que sean sus soldados, los naipes, los que hagan de arcos. De ese modo, no importa que los erizos o los flamencos no cooperen. Para eso están sus incondicionales soldados quienes deberán moverse o sufrir el castigo sumario: “que le corten la cabeza”. Así cualquiera coopera, ¿no?
Sin embargo, lo más lógico sería preocuparse por entender por qué es que no se puede jugar apropiadamente al croquet y no cortar cabezas hasta quedarse sin jugadores. ¿Por qué es mejor cambiar los instrumentos del juego en lugar de amenazar con cortarle la cabeza a quien se ponga en la oposición indolente?
¿Por qué ninguno de los ministros que participa de ProInversión salió en defensa de René Cornejo? ¿Temía que su cabeza fuera la que rodase en lugar de la del Director Ejecutivo de ProInversión? La rápida renuncia de Cornejo le ha facilitado la vida al Presidente de OSITRAN quien ahora puede permanecer en silencio mientras al Presidente García alguien le explica que en realidad otras eran las cabezas que debía haber reclamado.
No quiero cerrar esta columna reconociendo públicamente mi aprecio por la destacada labor de la Ministra Araoz quien junto al equipo del Mincetur han logrado sacar adelante el Tratado de Libre Comercio con EEUU. Para ella y su equipo vayan los aplausos del caso. Me encantaría que hoy jueves la tapa de este diario informase sobre la aprobación del protocolo de enmiendas por parte de nuestro Congreso. A seguir abriendo puertas de oportunidad y prosperidad para todos los peruanos.
lunes, 25 de junio de 2007
Institucionalidad
Columna de Fernando Zavala en Peru 21
Colombia acaba de lograr el grado de inversión para sus papeles de deuda, logro que el Perú también busca en el corto plazo. Cuando uno analiza las razones de esta mejora crediticia para Colombia, aparecen dos principales: los temas económicos y la institucionalidad. En términos de estabilidad económica, el Perú destaca más que Colombia en los últimos cinco años: mayor crecimiento, menor inflación, menor deuda, menor déficit. Sin embargo, parecería que es el segundo factor (institucionalidad) donde Colombia logró superarnos y es ahí donde debemos enfocar nuestro trabajo. Hay que revisar el marco institucional, lograr mayor estabilidad y transparencia en las reglas de juego, tener un sistema judicial que funcione y un marco regulatorio autónomo. Tenemos que evitar que se repitan los casos de la elección del Tribunal Constitucional y del cambio de reglas de los reguladores. No debemos afectar a instituciones que funcionan, como el BCR.
Colombia acaba de lograr el grado de inversión para sus papeles de deuda, logro que el Perú también busca en el corto plazo. Cuando uno analiza las razones de esta mejora crediticia para Colombia, aparecen dos principales: los temas económicos y la institucionalidad. En términos de estabilidad económica, el Perú destaca más que Colombia en los últimos cinco años: mayor crecimiento, menor inflación, menor deuda, menor déficit. Sin embargo, parecería que es el segundo factor (institucionalidad) donde Colombia logró superarnos y es ahí donde debemos enfocar nuestro trabajo. Hay que revisar el marco institucional, lograr mayor estabilidad y transparencia en las reglas de juego, tener un sistema judicial que funcione y un marco regulatorio autónomo. Tenemos que evitar que se repitan los casos de la elección del Tribunal Constitucional y del cambio de reglas de los reguladores. No debemos afectar a instituciones que funcionan, como el BCR.
El retorno del Banco Agrario
Columna de Gianfranco Castagnola en Peru 21
La ley aprobada por el Congreso que permite a Agrobanco dar crédito directamente a los agricultores constituye un error que, tarde o temprano, tendrá un costo que tendremos que asumir todos los peruanos. Bancos, cajas municipales, cajas rurales y edpymes tienen prestado al agro S/.1,800 millones. Agrobanco canalizaba sus créditos (S/.108 millones) a través de estas instituciones, que tienen la experiencia para calificar el riesgo de los agricultores. ¿Tiene Agrobanco este conocimiento? ¿Por qué prestaría Agrobanco a un agricultor que una caja rural no considera sujeto de crédito? ¿De dónde saldrán los recursos de Agrobanco para realizar estos préstamos? ¿Los recuperará? ¿Podrá una entidad estatal aplicar rigurosamente una política de cobranzas sin generar una reacción social? ¿Pondrían los congresistas que votaron por su aprobación una parte de su remuneración como capital social de Agrobanco? ¿O no confían en su solidez y rentabilidad?
La ley aprobada por el Congreso que permite a Agrobanco dar crédito directamente a los agricultores constituye un error que, tarde o temprano, tendrá un costo que tendremos que asumir todos los peruanos. Bancos, cajas municipales, cajas rurales y edpymes tienen prestado al agro S/.1,800 millones. Agrobanco canalizaba sus créditos (S/.108 millones) a través de estas instituciones, que tienen la experiencia para calificar el riesgo de los agricultores. ¿Tiene Agrobanco este conocimiento? ¿Por qué prestaría Agrobanco a un agricultor que una caja rural no considera sujeto de crédito? ¿De dónde saldrán los recursos de Agrobanco para realizar estos préstamos? ¿Los recuperará? ¿Podrá una entidad estatal aplicar rigurosamente una política de cobranzas sin generar una reacción social? ¿Pondrían los congresistas que votaron por su aprobación una parte de su remuneración como capital social de Agrobanco? ¿O no confían en su solidez y rentabilidad?
jueves, 21 de junio de 2007
Agrobanco: un instrumento equivocado
Columna de Eduardo Morón en El Comercio
Partamos de algo esencial. Usted y yo pagamos impuestos. Eso supuestamente nos debería dar derecho a reclamar cuando vemos que el Congreso o el Gobierno opta por malgastarlos. Acaban de salir los resultados del primer trimestre del año de la Encuesta Nacional de Hogares que muestran una vez más que la calidad del gasto público si importa cuando se trata de los resultados de la lucha contra la pobreza. No basta una billetera llena si no se corrige la forma como se ejecuta el gasto. Imaginen tratar de ir de Lima a Arequipa en un auto con un hueco en el tanque de gasolina, pero con la billetera llena de efectivo para echar cuanta gasolina haga falta. Eso es lo que hace el gobierno, no solo este, también lo hicieron todos los anteriores que yo recuerde unos con menos plata en las cuentas fiscales y otros con muchísimo menos.
La semana pasada me quejaba que el gobierno aprista no tenía o no comunicaba una idea muy clara de lo que quería hacer. Bueno, parece que no se les ocurrió mejor idea que desempolvar el viejo y querido plan de gobierno y empezar a poner en práctica lo conveniente y también lo inconveniente. En la última categoría está una de esas promesas presidenciales que todo el mundo esperaba que el Presidente ignorase: hacer del Agrobanco un banco de primer piso. Esto es permitir que Agrobanco preste sin intermediarios especializados de por medio. Por ahora Agrobanco funcionaba como una entidad de segundo piso, es decir, no atendía directamente a nadie. En realidad, 2 de cada 3 soles que prestaba lo hacía a través de otras instituciones financieras especializadas. Es decir, su rol era básicamente servir de fuente de recursos para que otros tomen el riesgo que implica prestar a agricultores.
Pero parece que eso no es suficiente y los congresistas aprobaron que Agrobanco tenga carta libre para prestar a quien ellos decidan de manera directa. ¿Qué va a pasar con las cajas municipales, rurales y EDPYMEs que hoy están recibiendo fondos de Agrobanco y luego tendrán que competir con Agrobanco en una clara situación de desventaja? Mientras todas estas instituciones financieras obtienen recursos en el mercado privado de fondos, Agrobanco cuenta con una línea directa del Tesoro Público. Así yo también pongo mi banco.
Los bancos públicos están sujetos a un montón de jaloneos del sector público y seguramente el Agrobanco no será la excepción. Cuando los tiempos difíciles regresen seguramente los mismos congresistas serán los que salgan a rescatar a los pequeños agricultores que no tienen porqué cargar con el peso de esas deudas. Quien las cargará seremos nosotros los contribuyentes que seguiremos aportando con nuestros impuestos recursos para financiar estas aventuras demagógicas.
¿Se imagina que si usted fuera socio de esta entidad aprobaría semejante iniciativa? Me quedan tantas dudas para nuestros congresistas que solo alcanzo a listarlas: ¿Se han puesto a pensar que toda institución financiera requiere de un tamaño mínimo para operar eficientemente? ¿Se han detenido a reflexionar que el crédito que ellos no proveen alguien más lo entrega (proveedores, compradores, el resto del sistema financiero, etc)? ¿Se han detenido a pensar si esta es la mejor forma de ayudar a quienes realmente se quiere ayudar. Insisto que un tema recurrente en este gobierno es su incapacidad en reconocer cual es la mejor forma de atender a quienes se quiere apoyar. No están mal los objetivos, lo que está mal son los instrumentos.
Partamos de algo esencial. Usted y yo pagamos impuestos. Eso supuestamente nos debería dar derecho a reclamar cuando vemos que el Congreso o el Gobierno opta por malgastarlos. Acaban de salir los resultados del primer trimestre del año de la Encuesta Nacional de Hogares que muestran una vez más que la calidad del gasto público si importa cuando se trata de los resultados de la lucha contra la pobreza. No basta una billetera llena si no se corrige la forma como se ejecuta el gasto. Imaginen tratar de ir de Lima a Arequipa en un auto con un hueco en el tanque de gasolina, pero con la billetera llena de efectivo para echar cuanta gasolina haga falta. Eso es lo que hace el gobierno, no solo este, también lo hicieron todos los anteriores que yo recuerde unos con menos plata en las cuentas fiscales y otros con muchísimo menos.
La semana pasada me quejaba que el gobierno aprista no tenía o no comunicaba una idea muy clara de lo que quería hacer. Bueno, parece que no se les ocurrió mejor idea que desempolvar el viejo y querido plan de gobierno y empezar a poner en práctica lo conveniente y también lo inconveniente. En la última categoría está una de esas promesas presidenciales que todo el mundo esperaba que el Presidente ignorase: hacer del Agrobanco un banco de primer piso. Esto es permitir que Agrobanco preste sin intermediarios especializados de por medio. Por ahora Agrobanco funcionaba como una entidad de segundo piso, es decir, no atendía directamente a nadie. En realidad, 2 de cada 3 soles que prestaba lo hacía a través de otras instituciones financieras especializadas. Es decir, su rol era básicamente servir de fuente de recursos para que otros tomen el riesgo que implica prestar a agricultores.
Pero parece que eso no es suficiente y los congresistas aprobaron que Agrobanco tenga carta libre para prestar a quien ellos decidan de manera directa. ¿Qué va a pasar con las cajas municipales, rurales y EDPYMEs que hoy están recibiendo fondos de Agrobanco y luego tendrán que competir con Agrobanco en una clara situación de desventaja? Mientras todas estas instituciones financieras obtienen recursos en el mercado privado de fondos, Agrobanco cuenta con una línea directa del Tesoro Público. Así yo también pongo mi banco.
Los bancos públicos están sujetos a un montón de jaloneos del sector público y seguramente el Agrobanco no será la excepción. Cuando los tiempos difíciles regresen seguramente los mismos congresistas serán los que salgan a rescatar a los pequeños agricultores que no tienen porqué cargar con el peso de esas deudas. Quien las cargará seremos nosotros los contribuyentes que seguiremos aportando con nuestros impuestos recursos para financiar estas aventuras demagógicas.
¿Se imagina que si usted fuera socio de esta entidad aprobaría semejante iniciativa? Me quedan tantas dudas para nuestros congresistas que solo alcanzo a listarlas: ¿Se han puesto a pensar que toda institución financiera requiere de un tamaño mínimo para operar eficientemente? ¿Se han detenido a reflexionar que el crédito que ellos no proveen alguien más lo entrega (proveedores, compradores, el resto del sistema financiero, etc)? ¿Se han detenido a pensar si esta es la mejor forma de ayudar a quienes realmente se quiere ayudar. Insisto que un tema recurrente en este gobierno es su incapacidad en reconocer cual es la mejor forma de atender a quienes se quiere apoyar. No están mal los objetivos, lo que está mal son los instrumentos.
domingo, 17 de junio de 2007
Agrobanco ya fue
Columna de Fernando Zavala en Peru 21
Nuevamente se discute ampliar las facultades de Agrobanco para que pueda prestar directamente y captar depósitos de ahorro. Y nuevamente pensamos que la problemática de este sector es solo el crédito y no buscamos soluciones de largo plazo. Aprovechemos que se discute la nueva ley de Agrobanco para evaluar temas que pueden tener mayor impacto en el sector: 1. La nueva Ley de Aguas que permitiría asegurar su uso eficiente. 2. Fortalecer y unificar los sistemas de registro de la propiedad. 3. Dar en concesión o vender áreas de reforestación. 4. Promover la asociatividad de pequeños agricultores. 5. Promover la investigación en el sector. 6. Dar más recursos al Proyecto Perú que construirá vías de acceso para los productos. 7. Iniciar un trabajo del Minag y los agricultores para identificar potencialidades de los TLC. Dar más facultades a Agrobanco puede terminar costando mucho al Tesoro Público. Además, ya se intentó en el pasado y no funcionó.
Nuevamente se discute ampliar las facultades de Agrobanco para que pueda prestar directamente y captar depósitos de ahorro. Y nuevamente pensamos que la problemática de este sector es solo el crédito y no buscamos soluciones de largo plazo. Aprovechemos que se discute la nueva ley de Agrobanco para evaluar temas que pueden tener mayor impacto en el sector: 1. La nueva Ley de Aguas que permitiría asegurar su uso eficiente. 2. Fortalecer y unificar los sistemas de registro de la propiedad. 3. Dar en concesión o vender áreas de reforestación. 4. Promover la asociatividad de pequeños agricultores. 5. Promover la investigación en el sector. 6. Dar más recursos al Proyecto Perú que construirá vías de acceso para los productos. 7. Iniciar un trabajo del Minag y los agricultores para identificar potencialidades de los TLC. Dar más facultades a Agrobanco puede terminar costando mucho al Tesoro Público. Además, ya se intentó en el pasado y no funcionó.
jueves, 14 de junio de 2007
Hoy: lluvia de millones, ¿mañana?
Columna de Eduardo Morón en El Comercio
El presidente García se dio el gusto y el lunes entregó a gobiernos regionales y locales millonarias sumas de dinero “fresco” como varias veces enfatizó. Frente a las continuas críticas a su tantas veces mentado shock de inversión pública no se le ocurrió mejor idea que presentar unos cheques gigantes dando la imagen que cada una de estas autoridades parecía estar cobrando el premio gordo de la lotería. La verdad es que más pareció una forma exagerada de hacer notar que el problema de la incapacidad de gastar la enorme cantidad de recursos –hoy- disponible es responsabilidad también de otros actores de la escena política.
Sin duda el problema implica responsabilidades compartidas y por ello se requiere de liderazgos compartidos. Se necesita que los líderes locales asuman la responsabilidad de explicar los beneficios de cada opción, de cada alternativa. Obviamente aquí muchas autoridades y pueblos en general enfrentan el problema que mucha de esa información es costosa generar y muchas veces nadie está dispuesto a gastar para obtenerla y otras veces ni siquiera existen los recursos localmente para hacerlo. ¿Por qué es mejor destinar los recursos del canon en una nueva posta médica en lugar de invertirlos en mejorar el actual camino de herradura a la ciudad más próxima? ¿Cuánto más se mejorarán los indicadores socioeconómicos básicos de la población local con una u otra alternativa? ¿Por qué tiene sentido priorizar aquellas cosas que beneficiarán a los hijos de los actuales votantes? ¿Quién va a proveer de esa información o vamos a decidir así no más, por intuición?
Asimismo, es su tarea explicar las bondades de que parte de este dinero se debe ahorrar para cuando los abundantes recursos del canon no lleguen. ¡En ningún pueblo llueve todos los días del año! Parte de esos recursos deben ahorrarse para tener con qué mantener aquellas inversiones que se hagan en caminos, redes de desagüe y electricidad, inclusive en mantener las aulas o postas de salud existentes. El objetivo no puede ser inaugurar obras, cortar cintas y descorchar botellas. El objetivo tiene que ser mejorar la calidad de vida de esas poblaciones. El problema es que alcaldes elegidos por tres años con poco menos del 20% de la votación no tienen ningún incentivo para pensar en plazos largos.
Al gobierno central le corresponde la responsabilidad de acompañar este proceso desbloqueando regulaciones que impidan la pronta ejecución de proyectos consensuados y técnicamente perfilados. Le corresponde mostrar las buenas prácticas para que otros copien lo bueno y mostrar los grandes errores para que éstos últimos no se multipliquen.
Al país le va ir muy mal en el futuro si demostramos incompetencia para gastar los abundantes recursos que hoy tenemos. Nuestra historia está llena de errores similares. El presidente no puede limitar la responsabilidad del gobierno a entregar recursos. Es más, el gobierno debería haber propuesto una forma de evitar tener que entregar de esta manera tantos recursos a ciertas zonas. No pueden las autoridades salir a decir que “lo hice porque la ley me obliga”. Ellos sabían del problema anticipadamente y no se ha hecho lo necesario para evitar caer en el problema. Si el gobierno central no va a ser prudente y pensar en el futuro cómo puede exigir lo mismo a los gobiernos locales. Hoy hay lluvia de millones de dinero fresco para todos, ¿y quién piensa en mañana? ¿O usted se gastaría en una noche el premio gordo de la lotería? Si lo hace, por lo menos, invite.
El presidente García se dio el gusto y el lunes entregó a gobiernos regionales y locales millonarias sumas de dinero “fresco” como varias veces enfatizó. Frente a las continuas críticas a su tantas veces mentado shock de inversión pública no se le ocurrió mejor idea que presentar unos cheques gigantes dando la imagen que cada una de estas autoridades parecía estar cobrando el premio gordo de la lotería. La verdad es que más pareció una forma exagerada de hacer notar que el problema de la incapacidad de gastar la enorme cantidad de recursos –hoy- disponible es responsabilidad también de otros actores de la escena política.
Sin duda el problema implica responsabilidades compartidas y por ello se requiere de liderazgos compartidos. Se necesita que los líderes locales asuman la responsabilidad de explicar los beneficios de cada opción, de cada alternativa. Obviamente aquí muchas autoridades y pueblos en general enfrentan el problema que mucha de esa información es costosa generar y muchas veces nadie está dispuesto a gastar para obtenerla y otras veces ni siquiera existen los recursos localmente para hacerlo. ¿Por qué es mejor destinar los recursos del canon en una nueva posta médica en lugar de invertirlos en mejorar el actual camino de herradura a la ciudad más próxima? ¿Cuánto más se mejorarán los indicadores socioeconómicos básicos de la población local con una u otra alternativa? ¿Por qué tiene sentido priorizar aquellas cosas que beneficiarán a los hijos de los actuales votantes? ¿Quién va a proveer de esa información o vamos a decidir así no más, por intuición?
Asimismo, es su tarea explicar las bondades de que parte de este dinero se debe ahorrar para cuando los abundantes recursos del canon no lleguen. ¡En ningún pueblo llueve todos los días del año! Parte de esos recursos deben ahorrarse para tener con qué mantener aquellas inversiones que se hagan en caminos, redes de desagüe y electricidad, inclusive en mantener las aulas o postas de salud existentes. El objetivo no puede ser inaugurar obras, cortar cintas y descorchar botellas. El objetivo tiene que ser mejorar la calidad de vida de esas poblaciones. El problema es que alcaldes elegidos por tres años con poco menos del 20% de la votación no tienen ningún incentivo para pensar en plazos largos.
Al gobierno central le corresponde la responsabilidad de acompañar este proceso desbloqueando regulaciones que impidan la pronta ejecución de proyectos consensuados y técnicamente perfilados. Le corresponde mostrar las buenas prácticas para que otros copien lo bueno y mostrar los grandes errores para que éstos últimos no se multipliquen.
Al país le va ir muy mal en el futuro si demostramos incompetencia para gastar los abundantes recursos que hoy tenemos. Nuestra historia está llena de errores similares. El presidente no puede limitar la responsabilidad del gobierno a entregar recursos. Es más, el gobierno debería haber propuesto una forma de evitar tener que entregar de esta manera tantos recursos a ciertas zonas. No pueden las autoridades salir a decir que “lo hice porque la ley me obliga”. Ellos sabían del problema anticipadamente y no se ha hecho lo necesario para evitar caer en el problema. Si el gobierno central no va a ser prudente y pensar en el futuro cómo puede exigir lo mismo a los gobiernos locales. Hoy hay lluvia de millones de dinero fresco para todos, ¿y quién piensa en mañana? ¿O usted se gastaría en una noche el premio gordo de la lotería? Si lo hace, por lo menos, invite.
lunes, 11 de junio de 2007
Otro tipo de investigación
Columna de Fernando Zavala en Peru 21
Una vez más (ya van 17 veces) se quiere investigar si en el BCR y en otras instituciones del sector economía existen irregularidades. Los que conocen de administración pública saben que el BCR, seguido del MEF, la Sunat y la SBS son modelos de institución pública a nivel internacional. En los últimos años estas instancias han sido el soporte para llevar adelante importantes reformas y mantener la estabilidad económica. La investigación que se ha planteado en los últimos días sí se debería realizar pero con otro enfoque: averiguar cómo estas instituciones han logrado ser eficientes, cómo han logrado institucionalidad y por qué son reconocidas internacionalmente. Se debería investigar (para aplicarlo al resto de la administración pública) cómo el BCR sigue captando a los mejores economistas del país pagando sueldos por debajo del mercado, averiguar cómo hacen para tener el mayor número de profesionales con grado de doctor y cómo han logrado tener una línea de carrera reteniendo a los mejores. No maltratemos a instituciones que son eficientes y que pueden ser un ejemplo para la reforma del Estado.
Una vez más (ya van 17 veces) se quiere investigar si en el BCR y en otras instituciones del sector economía existen irregularidades. Los que conocen de administración pública saben que el BCR, seguido del MEF, la Sunat y la SBS son modelos de institución pública a nivel internacional. En los últimos años estas instancias han sido el soporte para llevar adelante importantes reformas y mantener la estabilidad económica. La investigación que se ha planteado en los últimos días sí se debería realizar pero con otro enfoque: averiguar cómo estas instituciones han logrado ser eficientes, cómo han logrado institucionalidad y por qué son reconocidas internacionalmente. Se debería investigar (para aplicarlo al resto de la administración pública) cómo el BCR sigue captando a los mejores economistas del país pagando sueldos por debajo del mercado, averiguar cómo hacen para tener el mayor número de profesionales con grado de doctor y cómo han logrado tener una línea de carrera reteniendo a los mejores. No maltratemos a instituciones que son eficientes y que pueden ser un ejemplo para la reforma del Estado.
sábado, 9 de junio de 2007
La crisis de los reguladores
Columna de Gianfranco Castagnola en Peru 21
Una norma promulgada por el Gobierno, mediante la cual se determina que son los presidentes de los organismos reguladores y no sus directorios quienes nombran a sus gerentes generales, ha provocado la renuncia masiva de miembros de dichos de directorios. Es muy malo que esto suceda. En una economía de mercado, en las actividades que requieren de regulación del Estado es indispensable que esta suerte de "árbitros de las buenas prácticas competitivas" (Osiptel, Osinergmin, Ositran y Sunass) sea independiente del poder político y tome sus decisiones basada fundamentalmente en criterios técnicos. Una práctica saludable es que sus miembros sean nombrados escalonadamente en el tiempo -es decir, cambiando uno cada año o dos años- y, como es usual en el sector privado, que su gerente general sea ratificado por el directorio. No hay ninguna razón para que ello no ocurra en el sector público. Haría bien el Gobierno en rectificar este error.
Una norma promulgada por el Gobierno, mediante la cual se determina que son los presidentes de los organismos reguladores y no sus directorios quienes nombran a sus gerentes generales, ha provocado la renuncia masiva de miembros de dichos de directorios. Es muy malo que esto suceda. En una economía de mercado, en las actividades que requieren de regulación del Estado es indispensable que esta suerte de "árbitros de las buenas prácticas competitivas" (Osiptel, Osinergmin, Ositran y Sunass) sea independiente del poder político y tome sus decisiones basada fundamentalmente en criterios técnicos. Una práctica saludable es que sus miembros sean nombrados escalonadamente en el tiempo -es decir, cambiando uno cada año o dos años- y, como es usual en el sector privado, que su gerente general sea ratificado por el directorio. No hay ninguna razón para que ello no ocurra en el sector público. Haría bien el Gobierno en rectificar este error.
jueves, 7 de junio de 2007
Me encanta cuando un plan se realiza
Columna de Eduardo Morón en El Comercio
Le propongo que haga usted la siguiente prueba, tome un lápiz y papel y escriba en menos de 3 minutos las cinco grandes prioridades de este gobierno. No se desanime si solo logra escribir una o dos yo me quedé exactamente igual. El viernes pasado me invitaron a conversar con los asesores de un grupo político en el Congreso de la República y presentarles mi apreciación sobre el primer año del gobierno del Presidente García. Lo más difícil fue contestar la pregunta: ¿cuáles son las cinco prioridades del actual gobierno?
No sé si es porque el Presidente habla de esto y de aquello y así termina por confundir incluso al más ávido de estar enterado. Quizás el problema sea creer que la suma de cortos plazos es un largo plazo. El gabinete a veces parece más dedicado a responder las urgencias de la coyuntura que a trabajar en lo que quedará luego de que la espuma informativa se desvanezca.
De repente es un problema de comunicación producto de los escándalos de la semana, los cuales terminan por diluir el mensaje central del gobierno. Una semana es un señor que tenía juicios pendientes pero igual lo nombraron viceministro, la siguiente es una señora que ha encontrado la sabiduría en el consejo de las empleadas del hogar, la próxima otra señora que contrata gente pero que esa gente es tan buena gente que le regala su sueldo, y así sucesivamente al extremo que los programas de “ampays” de nuestra TV palidecen en comparación con el espectáculo que viene de la política. Mis colegas columnistas / publicistas sin duda podrían intentar explicar porqué el gobierno comunica tan mal lo que en realidad quiere hacer.
Cuando uno analiza porqué se hacen o se dejan de hacer un conjunto de reformas, o un plan de reformas, típicamente los culpables son: la falta de ideas, la ausencia de voluntad, la inexistencia de un liderazgo que impulse el plan, o la falta de recursos para poder llevar a cabo dichas ideas. Difícilmente diría que se trata de un problema de voluntad pues del Presidente para abajo hay múltiples señales favorables. Tampoco el tema de recursos pareciera ser el que esta vez detiene las cosas. Al menos no en lo que se refiere a recursos financieros. Por ello, las únicas explicaciones que quedan son la falta de recursos humanos, en parte expresada por la falta de liderazgo. El presidente puede ser quien lleve este tema en la agenda política pero no es quien está encargado de la ejecución. El presidente del Consejo de Ministros vive abrumado por los múltiples incendios que debe apagar y algunos de los ministros ajustan sus acciones para ver si siguen saliendo en la foto del próximo 28 de julio. El ministro de Economía y Finanzas quien en otras épocas fue el que lideró este tipo de esfuerzo no termina de olvidarse que ya no es solamente ministro de Finanzas. Al MEF le falta gente si es que ellos quieren asumir este reto. Mientras tanto, al viceministro de Economía lo acaban de desembarcar del Consejo Interministerial de Asuntos Sociales no sé si por falta de ideas o por falta de voluntad de liderar la reforma de los programas sociales.
A costa de sonar muy tío la frase con que he titulado esta columna era muy utilizada en uno de mis programas de TV favoritos. Anibal, el líder de “Los Magníficos”, interpretado por George Peppard, terminaba el show diciéndola luego de que su plan previamente diseñado había funcionado a la perfección. No pretendo ponerme a leer –otra vez- el plan de gobierno del APRA pero ojalá que el presidente García pueda decir eso mismo el 2011 si es que efectivamente el gobierno logra poner en marcha un ambicioso plan de reformas que hasta hoy sigue en los cajones de algún escritorio público.
Le propongo que haga usted la siguiente prueba, tome un lápiz y papel y escriba en menos de 3 minutos las cinco grandes prioridades de este gobierno. No se desanime si solo logra escribir una o dos yo me quedé exactamente igual. El viernes pasado me invitaron a conversar con los asesores de un grupo político en el Congreso de la República y presentarles mi apreciación sobre el primer año del gobierno del Presidente García. Lo más difícil fue contestar la pregunta: ¿cuáles son las cinco prioridades del actual gobierno?
No sé si es porque el Presidente habla de esto y de aquello y así termina por confundir incluso al más ávido de estar enterado. Quizás el problema sea creer que la suma de cortos plazos es un largo plazo. El gabinete a veces parece más dedicado a responder las urgencias de la coyuntura que a trabajar en lo que quedará luego de que la espuma informativa se desvanezca.
De repente es un problema de comunicación producto de los escándalos de la semana, los cuales terminan por diluir el mensaje central del gobierno. Una semana es un señor que tenía juicios pendientes pero igual lo nombraron viceministro, la siguiente es una señora que ha encontrado la sabiduría en el consejo de las empleadas del hogar, la próxima otra señora que contrata gente pero que esa gente es tan buena gente que le regala su sueldo, y así sucesivamente al extremo que los programas de “ampays” de nuestra TV palidecen en comparación con el espectáculo que viene de la política. Mis colegas columnistas / publicistas sin duda podrían intentar explicar porqué el gobierno comunica tan mal lo que en realidad quiere hacer.
Cuando uno analiza porqué se hacen o se dejan de hacer un conjunto de reformas, o un plan de reformas, típicamente los culpables son: la falta de ideas, la ausencia de voluntad, la inexistencia de un liderazgo que impulse el plan, o la falta de recursos para poder llevar a cabo dichas ideas. Difícilmente diría que se trata de un problema de voluntad pues del Presidente para abajo hay múltiples señales favorables. Tampoco el tema de recursos pareciera ser el que esta vez detiene las cosas. Al menos no en lo que se refiere a recursos financieros. Por ello, las únicas explicaciones que quedan son la falta de recursos humanos, en parte expresada por la falta de liderazgo. El presidente puede ser quien lleve este tema en la agenda política pero no es quien está encargado de la ejecución. El presidente del Consejo de Ministros vive abrumado por los múltiples incendios que debe apagar y algunos de los ministros ajustan sus acciones para ver si siguen saliendo en la foto del próximo 28 de julio. El ministro de Economía y Finanzas quien en otras épocas fue el que lideró este tipo de esfuerzo no termina de olvidarse que ya no es solamente ministro de Finanzas. Al MEF le falta gente si es que ellos quieren asumir este reto. Mientras tanto, al viceministro de Economía lo acaban de desembarcar del Consejo Interministerial de Asuntos Sociales no sé si por falta de ideas o por falta de voluntad de liderar la reforma de los programas sociales.
A costa de sonar muy tío la frase con que he titulado esta columna era muy utilizada en uno de mis programas de TV favoritos. Anibal, el líder de “Los Magníficos”, interpretado por George Peppard, terminaba el show diciéndola luego de que su plan previamente diseñado había funcionado a la perfección. No pretendo ponerme a leer –otra vez- el plan de gobierno del APRA pero ojalá que el presidente García pueda decir eso mismo el 2011 si es que efectivamente el gobierno logra poner en marcha un ambicioso plan de reformas que hasta hoy sigue en los cajones de algún escritorio público.
domingo, 3 de junio de 2007
Para seguir con el ciclo expansivo
Columna de Fernando Zavala en Peru 21
En los últimos cinco años y medio el Perú ha acumulado un crecimiento de 48%. Según el último Marco Macroeconómico Multianual (MMM), son 22 trimestres de crecimiento, el periodo expansivo más largo y de menor volatilidad que se recuerde en la historia peruana. Se sustenta en el incremento de la inversión y del consumo privado -solo en 2006 la demanda interna creció 10.6%-, con constantes aumentos de la productividad. Esta oportunidad debe ser aprovechada para continuar con reformas estructurales que permitan expandir este ciclo varios años más. Asimismo, como dice el MMM, la prioridad debe ser reducir la pobreza en 10 puntos en los próximos cinco años. Tema clave será la eficiencia de la inversión social y de la inversión pública regional. Los US$2,000 millones que recibirán los gobiernos sub nacionales por canon y regalías en 2007 -y que no necesariamente se repetirán en el futuro- deben ser invertidos para generar mejores condiciones de vida a la población de menores recursos y condiciones de competitividad.
En los últimos cinco años y medio el Perú ha acumulado un crecimiento de 48%. Según el último Marco Macroeconómico Multianual (MMM), son 22 trimestres de crecimiento, el periodo expansivo más largo y de menor volatilidad que se recuerde en la historia peruana. Se sustenta en el incremento de la inversión y del consumo privado -solo en 2006 la demanda interna creció 10.6%-, con constantes aumentos de la productividad. Esta oportunidad debe ser aprovechada para continuar con reformas estructurales que permitan expandir este ciclo varios años más. Asimismo, como dice el MMM, la prioridad debe ser reducir la pobreza en 10 puntos en los próximos cinco años. Tema clave será la eficiencia de la inversión social y de la inversión pública regional. Los US$2,000 millones que recibirán los gobiernos sub nacionales por canon y regalías en 2007 -y que no necesariamente se repetirán en el futuro- deben ser invertidos para generar mejores condiciones de vida a la población de menores recursos y condiciones de competitividad.
sábado, 2 de junio de 2007
¿Falla el modelo o falla el Estado?
Columna de Gianfranco Castagnola en Peru 21
Si no se produce ningún shock externo, la producción del país continuará creciendo a tasas elevadas en los siguientes tres años. El PBI habrá pasado de US$53 mil millones en 2001 -cuando se inició el ciclo expansivo- a US$120 mil millones en 2009. El PBI per cápita se duplicaría, de US$2,081 a US$4,155. Este crecimiento está siendo liderado principalmente por la inversión que, contrariamente a lo que se sostiene, no está concentrada en la minería o en el gas, sino que abarca la mayoría de sectores productivos, muchos de ellos muy intensivos en generación de empleo. Si no hay cambios sustanciales en las políticas sociales, la pobreza se habrá reducido de 54% a 45%. Si bien se trata de un millón de pobres menos, es un avance insuficiente. El crecimiento sí está produciendo recursos fiscales para combatir la pobreza, pero el Estado no cumple con mejorar la educación, expandir la infraestructura y crear otras condiciones favorables para que los pobres se beneficien del modelo económico.
Si no se produce ningún shock externo, la producción del país continuará creciendo a tasas elevadas en los siguientes tres años. El PBI habrá pasado de US$53 mil millones en 2001 -cuando se inició el ciclo expansivo- a US$120 mil millones en 2009. El PBI per cápita se duplicaría, de US$2,081 a US$4,155. Este crecimiento está siendo liderado principalmente por la inversión que, contrariamente a lo que se sostiene, no está concentrada en la minería o en el gas, sino que abarca la mayoría de sectores productivos, muchos de ellos muy intensivos en generación de empleo. Si no hay cambios sustanciales en las políticas sociales, la pobreza se habrá reducido de 54% a 45%. Si bien se trata de un millón de pobres menos, es un avance insuficiente. El crecimiento sí está produciendo recursos fiscales para combatir la pobreza, pero el Estado no cumple con mejorar la educación, expandir la infraestructura y crear otras condiciones favorables para que los pobres se beneficien del modelo económico.
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